vivir con una enfermedad mental (Urii Rodz)
Según la OMS (organización mundial de la salud), aproximadamente unas mil millones de personas en todo el mundo viven con algún tipo de trastorno mental, y no solo eso, si no que una de cada cuatro personas podría llegar a sufrir a lo largo de su vida algún tipo de trastorno, la ansiedad es el trastorno que más predomina seguida de la depresión, la esquizofrenia, la bipolaridad y trastornos de la alimentación, entre muchos otros.
Aquí pasa algo curioso porque las personas además de hacerle frente al trastorno mental que ya implica un gran esfuerzo y dedicación, también tienen que enfrentarse a la discriminación y el estigma de la sociedad en la que nosotros vivimos, sea de la familia, la escuela, los amigos, el trabajo etc. También los prejuicios, el desconocimiento, la falta de información y la mala información de estos hacen muchísimo más complicada la vida de las personas que tienen un trastorno mental. Y los obstáculos que presentan pueden ser en varias áreas, según un estudio realizado en los estados unidos las personas que padecen alguna patología mental tienen mucho menos probabilidades de encontrar algún trabajo, mantener una relación estable e incluso vivir en algún lugar digno. Esto es en parte debido a que aún la sociedad tiene puntos de vista muy estereotipados acerca de los trastornos, mucha gente cree que son personas muy agresivas, que son peligrosas, que son delincuentes, raras, o que están locas o mal ubicadas. Por eso mismo es la importancia de no fomentar y evitar usar palabras que puedan contribuir a ciertos estereotipos negativos.
Se pueden ver muchas personas que no entienden algo y al no entenderlo lo que hacen es “hacerlo de menos”, como no pueden entender algún trastorno lo que hacen es minimizarlo, “solo tienes ansiedad” “solo tienes depresión, échale ganas y se te quitara” como si eso fuera algo mínimo. En las enfermedades físicas nosotros podemos muchas veces verlas pues se pueden notar, y las personas reciben comprensión, amor, cuidado, empatía, pero un esquizofrénico lo único que recibe son prejuicios, lo que puede ocasionar que las personas aparte de sentirse mal de tener ese trastorno, muy difícilmente piden ayuda es decir viven escondiendo los síntomas, cuando los hijos tienen la confianza de decirle a sus padres estos no creen sinceramente en los psicólogos, y estos padres optan por llevarlos mejor pseudo-terapias que no están científicamente comprobadas, esto es peligroso porque en vez de ayudar a las personas pueden perjudicar al paciente aún más. Nunca hay que avergonzarse en pedir ayuda con algún tipo de profesional de la salud mental, ya sea psiquiatra o psicólogo.
Lo mejor es no asistir a pseudo-terapias que francamente no sirven, porque no tienen ningún sustento científico, el pedir ayuda para nada es un signo de debilidad, incluso yo pienso que enfrentar nuestros problemas requiere un cierto coraje y valor, y eso se logra en terapia, las personas que ya están en ese proceso sabrán de lo que me refiero, seamos más empáticos y evitemos a toda costa los prejuicios.
Comentarios
Publicar un comentario